Una de las cosas que más puede sorprender si visitamos Monforte de Lemos en septiembre es el fervor que suscitan, aún a día de hoy, romerías como la del San Mateo en la parroquia de A Parte. A tan solo 8 kilómetros de la ciudad, saliendo por el Morín, llegamos a una pequeña aldea a orillas del río Mao.
En busca de retazos de su historia, leemos en La Voz de Galicia que esta celebración, una de las más arraigadas en las tierras de Lemos, se ha venido llevando a cabo cada 21 de septiembre desde el siglo XX, concretamente después de la Guerra Civil Española. El pasado septiembre de 2020, a consecuencia de la pandemia de coronavirus, se decidió su suspensión.
No es extraño ver en la ciudad cómo los comercios o negocios cierran sus puertas a partir del mediodía en esa fecha para acudir a la romería. Hay una ruta de senderismo que va desde Monforte de Lemos hasta el entorno del puente sobre el río Mao, donde se instalan los enseres para una jornada de romería, música, juegos y comida campestre.
Al parecer, y según cuenta el historiador local Felipe Aira, la romería se celebraba antiguamente en las faldas del monte de San Vicente, donde por diferencias con los monjes del monasterio dejó de celebrarse y se trasladó a la parroquia de A Parte.

Iniciativa y empeño vecinal
Lo cierto es que a pesar de ser una celebración tan relevante, no la organiza el ayuntamiento sino los propios vecinos. En el blog de José Ramón Casanova, vemos la labor realizada en los últimos años, además de fotografías de diferentes ediciones.
Se recuperó una ruta a pie desde Monforte, y se divulgó realizándola con diferentes grupos de personas. Puedes ver aquí el mapa elaborado con este fin, que incluye tanto las áreas recreativas como los puntos de interés geológico, los castros, las fuentes, etc.

Camporrío y su plegamiento geológico
Bajando desde la iglesia de Santa María da Parte, llegamos a un precioso valle que conforma un paisaje de gran belleza a orillas del río Mao. El Moncai, Pena Gaiteira y el Monte de Valverde, rodean estas tierras en donde el río Cabe recibe a su afluente, el Mao.
En este paisaje podemos ver un plegamiento geológico sin señalizar, y recogido en 2016 por el Instituto Daviña Rey en un mapa metrominuto, para fomentar las rutas a pie por el concello. En la Ribeira Sacra, concretamente en Quiroga, encontramos el Pregamento de Campodola, integrado en el Xeoparque Montañas do Courel, y declarado monumento natural por la Xunta de Galicia.
En un paseo por el valle, casi en el límite con el concello lucense de Bóveda, podemos ver, desde la propia iglesia de A Parte, que conserva algún elemento antiguo de interés, como pozos, antiguos puentes, palomares, canales de regadío, etc. En invierno tampoco es raro ver cigüeñas en los campanarios o por los campos.